Papu Gómez rompió el silencio tras el doping: del dolor por la suspensión al reconocimiento a Scaloni y Messi
12 de septiembre de 2025
El campeón del mundo habló de su duro parate de dos años, recordó cómo lo ayudó Lionel Scaloni en sus inicios y reveló la receta que hizo brillar a Lionel Messi en la Selección Argentina.
Alejandro “Papu” Gómez volvió a hablar después de un silencio marcado por la suspensión que lo marginó dos años de las canchas tras conquistar el Mundial de Qatar 2022. En una extensa charla en el programa De visitante, el ex jugador de Atalanta repasó cómo transitó ese período, elogió la gestión de Lionel Scaloni y explicó por qué Messi alcanzó su mejor versión en la Selección.
“Los primeros meses fueron duros. No entendía por qué me pasaba a mí, justo en mi mejor momento. La vida te da estas sorpresas y la pasé mal. Tenía bronca con todo: con el fútbol, con el sistema. No me hago la víctima, el boludo fui yo”, reconoció, en referencia al jarabe para la tos de su hijo que derivó en el doping positivo.
El Papu también recordó la faceta humana de Scaloni, a quien conoció en Bérgamo cuando el hoy DT aún buscaba su camino como entrenador: “Fue la persona que me ayudó desde el primer día. Me acompañó a comprar un auto, a buscar casa. Se entrenaba a morir. Ya en ese momento buscaba ser técnico, y lo consiguió porque es muy cercano al jugador, no dice boludeces y va de frente”.
Sobre Messi, el mediocampista no dudó en resaltar el mérito del cuerpo técnico: “En la parte de gestión Scaloni fue muy vivo. Hizo una renovación después de Rusia 2018 con chicos que tenían hambre y rodeó a Leo de jugadores que se iban a matar por él. Eso lo hizo brillar”.
Más allá del dolor por la suspensión, Gómez asegura que el tiempo lo ayudó a madurar: “Me aislé, trabajé con psicólogos y conmigo mismo. Era un bucle del que no podía salir, pero de a poco pude levantarme. Hoy estoy feliz, volví a conectar con el fútbol desde otro lugar”.
En el balance, el Papu mezcla autocrítica, agradecimiento y esperanza. Y aunque admite que la vida lo puso a prueba en su mejor momento, su testimonio deja en claro que el amor por la pelota sigue intacto.