Milei se fue de boca en una cena con empresarios: "La economía va a subir como pedo de buzo"
25 de abril de 2024
El presidente de la Nación, Javier Milei, brindó un discurso en la cena anual de la Fundación Libertad. Estuvieron Macri, Bullrich, el Presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou y el ex presidente de España, José María Aznar, entre otros.
El presidente Javier Milei dio uno de sus discursos más desafiantes en el marco de la cena ofrecida este miércoles por la Fundación Libertad. Respondió a las críticas a su programa, ratificó el rumbo del ajuste y la no emisión monetaria y dejó en claro que seguirá adelante, aunque no tenga el acompañamiento de la política.
Habló ante una audiencia de más de 1.000 personas en la cena de la Fundación Libertad, con parte de los empresarios más importantes del país y visitas internacionales. Llamó la atención la importante presencia de exfuncionarios del gobierno de Mauricio Macri como, por ejemplo, el exministro de Economía, Hernán Lacunza, de Producción, Francisco Cabrera y de Transporte, Guillermo Dietrich, entre otros. Alejandro Roemmers, Cristiano Rattazzi, Federico Braun, Mario Grinman y Alberto Grimoldi, fueron algunos de los empresarios que participaron del encuentro.
Apoyo al Gabinete
El Presidente pidió que sus ministros estuvieran presentes y mechó en su discurso reconocimientos a su equipo. Tras saludar a Mauricio Macri, Luis Lacalle Pou y a José María Aznar, identificó a Patricia Bullrich entre el público y la calificó de “genia”. También se refirió a Federico Sturzenegger como “un coloso” y en más de una oportunidad ponderó “el trabajo enorme” que realiza el equipo económico encabezado por el ministro Luis Caputo y el titular del Banco Central, Santiago Bausili.
Milei: “No entienden qué es el dinero”
Comenzó su exposición haciendo referencia al origen del dinero, tal como adelantó Ámbito. Lo justificó señalando “descubrí … que la gran mayoría de los economistas locales, profesionales y de renombre, no tiene ni idea de algo tan importante en esto que es el problema del ancla nominal y porque básicamente no entienden qué es el dinero”.
Comentó que a lo largo de la historia se usaron distintos bienes para el intercambio como la sal, que en la antigüedad era un bien preciado dado que sirve para dar gusto a la comida y planteó que cualquiera se puede dar cuenta de esta característica si deja de utilizarla en su dieta.
Esta referencia le dio pie para hablar de otra dieta más difícil, la de recortar el gasto público. Dijo “deberíamos estar regocijándonos que por primera vez le estamos dando duro y parejo al gasto público, estamos cumpliendo el sueño de (Murray) Rothbart. Es increíble, ¿no? Digamos, una caída real del 35% del gasto público, vamos muchachos, eso es sacar al Estado del medio. Es decir, la verdadera presión fiscal es el tamaño del Estado. Si le pegamos semejante recorte, vamos que les estoy devolviendo libertad a lo loco”
Refiriéndose a los problemas del trueque, hizo mención de la dificultad que supone la “indivisibilidad” y lo explicó con tono jocoso de la siguiente manera: “Yo puedo querer comprar pan, el panadero quiere comprar el servicio análisis económico, pero digamos, o sea la cantidad de kilos de pan que me tiene que dar para que yo le hable una hora de economía, no mapea, al menos hoy y después de mi paso por la presidencia muchísimo más, porque tengo que seguir laburando después”.
El expresidente Mauricio Macri estuvo en el evento.
Defensa del ajuste
Hizo una enfática defensa de su programa y no ahorró críticas a los economistas que lo cuestionan. Afirmó que “si desde que asumimos en diciembre la base monetaria está constante, pese a que compramos u$s15.000 millones, pese a que se nos dispararon los puts, pese a que tuvimos que pagar los pasivos remunerados, la contracción por BOPREAL y la contracción por superávit fiscal ha sido tal que compensó todo eso y dejó la base monetaria constante, por eso está bajando la inflación”.
Reforzó el concepto señalando que “cuando dicen algunos economistas profesionales, asumo que algunos digamos, por ignorancia, otros por resentimientos, otro porque, digamos, o sea si se quisieran suicidar, lo mejor que podrían hacer es tirarse de lo más alto de su ego. Digo, quedarían hechos un huevo frito, abajo. “No hay plan de estabilización”, ¿y cómo es que baja la tasa de inflación? ¿qué es magia? No. Dejamos constantes la cantidad de dinero”.
En tren de refutar críticas, también salió al cruce de los que afirman que hay atraso cambiario. “En el plano cambiario, nosotros nos encontramos con una brecha del 200%. Es increíble, porque aparecen algunos economistas diciendo “el atraso cambiario”, esos mismos que dicen que hay un problema de atraso cambiario son los mismos que decían que había que poner el dólar a 600 y tenían una hipótesis inflación más alta. Nosotros lo pusimos por el equivalente a 1000 y tenemos menos inflación. Digo, podrían ser por lo menos no sé, coherentes para ser intelectualmente no tan deshonestos”.
Fideos con tuco
Los palos no fueron solo para la oposición. También hizo referencia, sin nombrarlo, al economista Carlos Melconian señalando que “había uno que decía “no podés dolarizar, si no hay fideos y no hay tuco, y me invitás fideos con tuco”. Se equivocó, pero es más fácil tirar volquetes de estiércol antes que reconocer el error. De hecho, una de las cosas, una de las cosas, miren, digamos si los que están murmurando se comieron el vaso, lo siento. La vida es así”. Melconian, que estaba entre los asistentes, en ese momento se retiró.
También anticipó la recuperación de la economía y lo que significará en términos políticos. “Cuando nosotros asumimos, los bonos estaban en 18 dólares, póngale 20 para redondear. Hoy los bonos están arriba de 60, recibimos el riesgo país en 2900 hoy estamos en 1150. Es decir, además, estamos haciendo una caída del riesgo país como pocas veces visto en la historia argentina. ¿Y saben qué? Eso predice que para adelante la economía rebota. Por eso, digamos, están tan nerviosos. Por eso utilizan causas nobles, para tratar de desestabilizar un gobierno porque saben que van a perder y no vuelven más”.