Luego de un fin de semana más frío del año, con temperaturas bajo cero pero con buenas condiciones del clima, la semana en la Ciudad de Buenos Aires y alrededores se mantendría con pronósticos similares y bajas marcas térmicas.

No se esperan lluvias para los próximos días, pero sí temperaturas mínimas similares a las del fin de semana y más acordes a la llegada del invierno, que según estableció el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) a través de un informe semanas atrás, será de los más crudos de los últimos años.

En este marco, para la semana que arranca este lunes se espera en el AMBA temperaturas mínimas que rondarán entre 3 y 8 grados, y máximas que ascenderán entre 11 y 16 grados.

Cómo estarán las temperaturas en el AMBA

La semana comienza este lunes con cielo parcialmente nublado en la madrugada y mañana, y ligeramente nublado en la tarde y noche; junto con una temperatura mínima de 5 grados y una máxima de 16, según el SMN. El viernes podría ser el día más frío de la semana.

El tiempo en Argentina la próxima semana: el #frío sigue presente ? y la Patagonia continúa con nevadas ?@ChGaravaglia nos cuenta cómo seguirá la semana en https://t.co/JVd09ooL8k pic.twitter.com/tscnqGQPNf

— Meteored.com.ar (@MeteoredAR) June 30, 2024

Las temperaturas para esta semana:

• Lunes: mínima de 5 grados, máxima de 16
• Martes: mínima de 6 grados, máxima de 17
• Miércoles: mínima de 8 grados, máxima de 14
• Jueves: mínima de 4 grados, máxima de 14
• Viernes: mínima de 3 grados, máxima de 11

Qué tiene que pasar para que caiga nieve en Buenos Aires

Para que se produzca una nevada:

•  Aire frío: No solo en la superficie, sino también en las capas altas de la atmósfera. La temperatura debe ser igual o inferior a 0°C en toda la columna de aire por la que desciendan las precipitaciones.
• Humedad: La presencia de vapor de agua en la atmósfera es fundamental para la formación de nubes y, posteriormente, de nieve.
• Precipitación: Es necesario que se produzcan precipitaciones en forma de nieve, lo que implica que las nubes deben encontrarse a una temperatura lo suficientemente baja como para que los cristales de hielo no se derritan antes de llegar al suelo.