De Zavaleta a Perú: este es ‘Pequeño J", el capo narco acusado de ordenar el triple crimen en Varela”
27 de septiembre de 2025
Tony Janzen Valverde Victoriano, de 20 años y oriundo de Perú, fue señalado como el cerebro detrás del asesinato de Brenda del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez. La Justicia emitió alertas nacionales e internacionales para dar con él y su mano derecha.
La investigación por el triple crimen de Florencio Varela dio un giro clave en las últimas horas. Las autoridades identificaron a Tony Janzen Valverde Victoriano, alias “Pequeño J”, un joven de 20 años oriundo del departamento peruano de La Libertad, como el presunto autor intelectual del brutal homicidio que conmociona al país.
Según confirmaron fuentes judiciales, el narco peruano habría intentado escapar del país, lo que motivó a que se hiciera pública su identidad y su imagen. Un operativo de la Policía Bonaerense en el barrio Zavaleta de la Ciudad de Buenos Aires buscó detenerlo, pero al momento del allanamiento ya no se encontraba en el lugar.
El ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, sostuvo que “Pequeño J” habría ordenado el crimen como un mensaje dentro de la estructura de la organización narcocriminal que lidera.
En paralelo, la Justicia también emitió un pedido de captura nacional e internacional con circular roja de Interpol para Matías Agustín Ozorio, de 28 años, señalado como la mano derecha de Valverde Victoriano y acusado de coautoría en el asesinato de las tres jóvenes.
El expediente detalla que Ozorio, junto a otros cuatro detenidos, participó en la brutal agresión en Florencio Varela, donde Brenda, Morena y Lara sufrieron golpes, patadas y heridas con armas blancas. Los fiscales calificaron el hecho como triple homicidio agravado por alevosía, ensañamiento y violencia de género.
En las últimas horas, la investigación sumó un nuevo capítulo: en Bolivia fue detenido Lázaro Víctor Sotacuro, ciudadano boliviano con DNI argentino, acusado de colaborar en el traslado de las víctimas. Había huido desde Jujuy hacia Villazón, donde fue arrestado y puesto a disposición de la Justicia argentina.
Con capturas internacionales en curso y la presión sobre el entorno del prófugo, la causa avanza para desentrañar la red narcocriminal detrás del crimen que sacudió a toda la sociedad.